viernes, 12 de noviembre de 2010

São Paulo, moderna y contradictoria

Como sabéis por mi anterior post, ayer fue el primer día en el que he podido ir a São Paulo en plan turismo en el mes que llevo aquí. Pude pasear por el mercado, pero también conocer otras partes "más duras" de la ciudad. Lo primero es que tengo que dejar claro que se nota que se está haciendo un esfuerzo ímprobo por modernizar la ciudad, y yo creo que se está consiguiendo. Seguramente por el Mundial de fútbol, aquí se nota que hay mucha obra pública que está consiguiendo mejorar la fluidez del tráfico, se ven edificios nuevos, modernos, y cosas así. Pero también se notan mucho los problemas estructurales de la ciudad: la marginalidad, la limpieza, el respeto por las cosas... Aún hay mucho que cambiar, pero no sólo en lo estético, sino también en lo ético, en el civismo, en las personas...
Entrando hacia el centro se ven los tremendos rascacielos por todas partes. Uno de ellos, me dicen, fue una favela hasta hace poco. Lo han desalojado y lo están restaurando. Lo malo es que la calle en donde está ese rascacielos está poblada de gente marginal, que como ayer hacía frío se habían encendido sus hogueritas en unas latas en la acera, gente con mantas sucias y raídas por los hombros que seguramente antes dormían mejor en el rascacielos-favela.
Tras mi visita al mercado, también pasé por las calles del Centro. La verdad es que no sabría diferenciar si paseaba por la avenida Eça de Queiroz o por la Castellana, salvo por el detalle de que las señales de tráfico aquí son distintas y porque hay edificios mucho más altos.

Después fui a la zona de Santa Ifigénia, que es algo así como  un "Chinatown" con una concentración de cientos, quizá un par de millares de mini-tiendas de informática y electrónica, todas muy juntas y muy apretaditas en pequeñas galerías en las que apenas encuentras algo distinto de una a otra. Las hay especializadas en juegos, otras en televisiones y otras en GPS y cosas así, pero el mismo esquema se repite una y otra vez en cada una de las galerías. Raramente te encuentras un pequeño café o una tienda de zumos naturales. Por la calle te asaltan chicos muy jóvenes ofreciéndote las últimas novedades en software, todas pirateadas, a 10 R$ (Unos 4€) cada DVD. ¿Que quieres el CS5 Master Collection en Español? 30 R$, (unos 12 €) por los tres DVD. ¿Que quieres el Autocad 2011 con todas sus ediciones? 20 R$ (Unos 8 €) por los dos DVD. ¿Que quieres el Fifa 11 en português? Pues 10 R$ (4 €)... Y así todo. La policía va contínuamente tras ellos, pero es como un tiburón atacando un banco de sardinas, alguna pilla, pero el resto siguen su camino...
Y después no hay gran diferencia con una ciudad europea, salvo en la temperatura y en su enorme cantidad de rascacielos, casi todos coronados con enormes (y a veces, antiestéticas) antenas de comunicaciones, televisión y radio. Así, a primera vista, es São Paulo: tan moderna y tan contradictoria...

2 comentarios:

  1. Ya me doy cuenta que tu tio te dió una vueltecilla por la gran urbe, impresionante no?
    Te la imaginabas así?

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  2. Ya la había visto, pero no había tenido tiempo de entrar al detalle. Sí me la imaginaba, por lo tanto, así. Pero por las zonas que fui, que no conocía, debo reconocer que me sorprendieron...

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