viernes, 26 de noviembre de 2010

A pleno sol

Ayer, pese a que al mediodía hacía un sol y un calor de justicia, por la tarde cayó una tormenta del carajo. Agua a mares, viento que derribó árboles y vallas, estuvimos sin electricidad unas cuantas horas... Pero lo cierto es que a la una de la tarde, después de comer, caía un sol implacable y estábamos a más de 35 grados. A esa hora, cuando iba a entrar en Publicenter para la jornada de tarde, me encontré con el albañil de la obra de al lado, el que aparece en la foto, y tuve la oportunidad de charlar un rato con él. Nieto de italianos y españoles, João me dijo que en Brasil se vive bien. Su mujer trabaja en una empresa y él, con su hijo pequeño, es albañil. Se extrañó de que yo hubiese querido ir a Brasil a trabajar. Sus hijos mayores sueñan con emigrar a Europa porque creen que en su país no tienen futuro. Él, hace unos cuantos años, recién casado, estuvo intentándolo en Italia y Francia, pero desistió.
Me dijo que si yo quería quedarme en Brasil, lo mejor sería que tuviese un buen oficio, porque gente como él, sobra aquí, "hay demasiados". Lo malo, continuó, es que "los que tenéis un oficio, en cuanto ganáis algún dinero, os hacéis ricos. Y para los ricos en este país no hay justicia. Si hay dinero, todo se compra", me dijo. "Nosotros, los que tenemos lo justo para vivir, tampoco tenemos justicia. Nadie cuida de nosotros".
"Ya ves", prosiguió, "yo aquí trabajando a pleno sol; y eso no es bueno. Además se está preparando una buena "tromboada", y tendré que seguir trabajando mientras que pueda, porque tengo que terminar esto esta semana".
El viento ayer derribó varios muros en Itú. João tuvo que volver de noche a revisar que el muro que había levantado. No se había caído. Hoy, cuando llegué al mediodía tras comer, João seguía afinando cosas de ese muro y orgulloso me dijo: "ves, lo hice bien, y aunque el cemento estaba crudo, este muro resistió". Y es que él cree que no tiene un oficio, él es de esos que sabe lo que se tiene entre manos... Como muchos otros que están infravalorados en este Brasil...

No hay comentarios:

Publicar un comentario