jueves, 28 de octubre de 2010

Cemento: Sâo Paulo y cemento

Sâo Paulo es una ciudad mareante. Veas a donde veas siempre hay cemento. Hay quien afirma que es la ciudad con más rascacielos del mundo y yo creo que tiene razón. Es una ciudad inabarcable. El 35% del PIB de Brasil sale de aquí (y el 18% del PIB de toda Sudamérica). Aún no la conozco, sólo he pasado por sus enormes "rodovías" para ir a hacer alguna cosa puntual, pero aún no me he pasado por sus calles. Sâo Paulo (que en realidad debería escribir São Paulo pero mi teclado no me lo permite fácilmente), es cemento. Y cuando el cemento se ha terminado, es más cemento, y más, y más...
Y después del cemento, o además de él, verás coches, y más coches, y más, y más... De hecho, en la ciudad está prohibida en algunos días y horarios la circulación para coches cuya matrícula acabe en 1 o 2 (los lunes), 3 o 4 (los martes), 5 o 6 (los miércoles), 7 u 8 (los jueves) y 9 o 0 (los viernes). Pero claro, en vez de usarse el servicio público de transportes, la mayoría tiene dos coches con matrículas distintas. En eso no se adelanta nada. Pero ya os contaré más cosas de esta megalópolis, la ciudad más grande de américa del sur, en otro momento, cuando la haya visitado con más calma.
(NOTA: Las fotografías de esta entrada han sido tomadas desde un coche a más de 100 km/h y con una llovizna persistente, por ello no tienen una calidad mínima exigible...)

No hay comentarios:

Publicar un comentario